Hembra
Alba fue abandonada en una perrera.
Formaba parte del grupo de animales de una granja escuela hasta que dejó de ser útil. Tras muchos partos, hoy vive libre con unos compañeros estupendos que la dejan tomar el sol y comer cosas deliciosas siempre que le apetece.
Como muchos cerdos vietnamitas, necesita cuidados en sus ojos, pero eso ya no es un problema porque confía plenamente en nosotras y hasta disfruta de las limpiezas.
Categoría: Santuario