Os presentamos a Pomelo, un gato muy pomposo y con unos ojazos de infarto.
Apareció por una calle en Arroyomolinos desorientado y muy asustado. Su familia le dejaba salir aún sabiendo cómo pueden acabar en la calle… se perdió y así llegó a nosotros. Y aquí sigue, sin que nadie haya preguntado por él.
Estamos seguros de que Pomelo echa de menos tener un hogar. Es un amor de gato con las personas, con los compis gatunos le cuesta un poco más pero se ha adaptado a la gatera y convive con ellos en perfecta armonía.
¿Le das la oportunidad de volver a tener una familia? ¡Te esperamos!
¡¡Requisito indispensable protecciones en las ventanas!!